Cuando nuestros hijos empiezan a decir sus primeras palabras, la emoción que nos embarga es –simplemente- indescriptible. Sin embargo, esa fascinación se convierte en preocupación cuando los pequeños de casa empiezan a decir palabras o contar historias mientras juegan. ¡No temas! Aunque no lo creas, hablar mientras juega le traer muchos beneficios a tu hijo.
Diversos estudios han establecido que esta práctica ayuda a los menores a desarrollar su intelecto, ya que están aprendiendo a comunicarse de diferentes maneras según el contexto en el que se encuentran. Pero, ese no es el único beneficio. A continuación, te mostramos otras razones por las cuales hablar mientras juega es beneficioso para tu niño.
- Le permite comprender y empatizar con otras personas que no tienen su mismo pensamiento.
- Aprende a autocorregirse, diferenciando el bien y el mal cuando está jugando.
- Mejora su capacidad de estructurar frases, ya que se toma el tiempo de decir frases comprensibles para él y para los roles que está asumiendo durante el juego.
- Aprende a mantenerse en silencio cuando otras personas está hablando.
- Aprende a solucionar conflictos.
- Adquiere un mayor conocimiento de las palabras.
- Aprende a investigar.
- Estimula la creatividad.
Como habrás visto, los niños se ven muy beneficiados cuando están hablando mientras juegan. Es importante que no reprimas sus actividades y escúchalo cada vez que te cuente alguna historia relacionada a tu juego. ¡Está en ti desarrollar su intelecto!
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